La Comarca es una editorial independiente que desarrolla su tarea fuera del sistema tradicional ofrecido al autor.

Teniendo en cuenta los preceptos volcados por Néstor Sánchez en este sitio, nuestra intención será editar la totalidad de su obra, más los trabajos de autores que adhieran a la misma.

Apartados de los condicionamientos del mercado, trabajaremos junto a cada autor ofreciéndole alternativas de publicación como la autogestión editorial y la edición asociada entre otras.

  

Desacato y fuga

La narrativa y la poesía tienen una esencia única: el ritmo de una lengua. Eso es lo único que cuenta: tener voz propia.

El fenómeno que nutre a la literatura es la resonancia, no la comunicación, como pretenden casi todos los críticos.

Los facilistas se adueñaron del corazón y la mente de los lectores como si el corazón y la mente fueran sólo un mercado.

El lector común no es provocado, es confirmado y descansa en una visión tranquilizadora, pobre de la literatura. La visión testimonial, casi la novelización del ensayo, que es lo que más abunda, representa un doble equívoco: el lector cree que está leyendo literatura y el que escribe cree que está ideologizando a una determinada persona. Y nó! Lo que hay allí es un gran descanso de cultura de muerte. Es difícil que se busque un libro para preguntarse más cosas; en general se buscan respuestas tranquilizadoras (ciertos libros vienen a confirmar que una novela es algo que se lee del principio hasta el fin, sin participar, sin pagar ningún precio de expectativa ni de creación propia, inverificable).

Sé que me dirijo a un lector difícil, que simpatice con la resonancia. Se trata necesariamente de un lector entrenado que revierta la tendencia que pretende sólo entretener y confirmar esquemas. (sólo quieren lo que no los contradice en nada...) La verdadera escritura es un estado permanente de pregunta.

Hay un desacato, un replanteo de la fatuidad de escribir. Ya no se trata de discutir con la literatura sino mas bien de parodiarla y en ello el humor es el elemento fundamental. Pongo el acento en el sentido del sentimiento del humor, de falta de respeto frente a uno mismo como imagen de escritor "serio", abrumado de historicismo y de supuestas obligaciones inútiles.

La relación entre política y literatura es un monumental equívoco.

La literatura tiene que ver con la ideología sólo en lo general, jamás en sus instrumentaciones parciales.

 

Ética lumpen

El lumpen tiene como oración la conducta. Difícilmente entre en el pacto biológico, difícilmente procree y se deje arrastrar por la murga del facilismo. La exigencia de no transigir con ese facilismo, la de seguir avanzando en su ruptura... Contrapongo lo lumpen a lo encásico: aquello propio de quienes constituyen su radio psicológico en los límites del egoísmo doméstico. Su cosmovisión del mundo no tiene otros parámetros y es tremendamente limitada. Así hay una literatura lumpen y otra encásica, una música lumpen y otra encásica. Por un lado va la murga y por otro lo underground, la vanguardia.

El código del escritor lumpen, del poeta, era sencillo:

1- No hacer carrera literaria. 2- No ganar ningún premio nacional.

3- No hacer periodismo y, 4- No hacer publicidad.